Juan Marsé abrió la puerta envuelto en su batín y con las zapatillas de andar por casa. Le esperé en su despacho mientras se vestía. Regresó con una camisa planchada, con los pantalones a juego y la cabellera peinada. Pero seguía llevando las zapatillas. Le insinué que se cambiara el calzado y respondió que así es como se sentía cómodo. Me alegré de que quisiera mantener ese detalle. Me regaló la foto.
Hänsel* i Gretel*
Publicació Cultural
Be First to Comment