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Retratando a Marta Calvo

Detrás de cada retrato hay una historia que contar. La fotógrafa literaria Marta Calvo nos presenta sus experiencias a través de una selección de fotos donde explora sus recuerdos con el escritor retratado.

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Hola Marta, muchas gracias por acceder a colaborar con Hänsel y Gretel* y crear con nosotros esta exposición, en la que nos sumergiremos en las experiencias que has vivido a lo largo de todo tu recorrido fotografiando; retratando, más bien dicho, a muchos de los autores más destacados a todos los niveles.

Según me cuentas, todo empezó con la oportunidad que te brindó la revista Qué leer con el encargo de una columna para fotografiar a los editores más importantes de ese momento, lo que se convirtió en claro precedente de lo que acabaría siendo tu carrera profesional.

A fin de cuentas, hablamos de arte por encargo. ¿Cuál es la consecuencia directa de que el ARTE sea por encargo? Por favor, explícanos una anécdota que represente esa consecuencia.

En este oficio, lo usual es tener que resolver una foto en cinco minutos. Yo ya estoy acostumbrada y sé cómo hacerlo, pero ahora me viene a la memoria el caso de Gay Talese. Estuve esperando a que me atendiera más de una hora y, cuando al fin lo hizo, me dijo que no quería posar porque tenía hambre. Yo tenía que retratarlo para la portada de ‘Qué Leer’ y acabé suplicando a su jefa de prensa que me diera dos minutos. Él accedió de mala gana y su cara lo evidenciaba. Le situé al lado del piano del bar y, cuando levanté la cámara, sonrió ligeramente. Conseguí disparar diez veces antes de que se diera la vuelta y se fuera. La foto salió en portada, pero sigo teniendo clavada la espina de qué hubiera pasado si, siendo él más generoso, me hubiera dado más tiempo.

En el mundo del retrato artístico, cuando recibes un encargo, tienes que adaptarte. En muchas ocasiones, preferirías retratar a otra persona, pero has de ser profesional y hacer lo que te piden. En el mundo editorial, hay dos tipos de encargos: los destinados a promocionar a un autor que acaba de publicar un libro y los destinados al archivo de la editorial. Con lo que más disfruto es con lo segundo, ya que, normalmente, me permiten ir a casa del escritor o escritora, donde todo es más íntimo y consciente. En estas ocasiones creas un vínculo con el modelo, que se abre, que expone su verdad, te muestra su universo que te permite traducir su mundo a imágenes.

 

¿Qué crees que caracteriza la esencia del retrato?

El sumun de un retrato es captar el alma del retratado. No siempre se consigue, depende de la generosidad con que se entregue la persona o la química que se consiga. Pero, al menos, la foto ha de tener un gesto donde se reconozca el carácter de la persona.

Técnicamente, la luz es el 50 % de un retrato. Si quiero sintetizar y potenciar el drama, uso el blanco y negro. El color es más emocional y descriptivo.

 

¿Qué autor crees que sintetiza mejor la voluntad de ser retratado?

Una parte del oficio del escritor es la promoción. Están los que la detestan y se nota, y están los que ponen la profesionalidad por delante del cansancio y siempre ofrecen su mejor cara. He fotografiado un par de veces al periodista reconvertido en político Antonio Baños. Es un ejemplo de autor con el que sé que me lo voy a pasar bien. Tiene un gran sentido del humor, es cercano y no le importa hacer un poco el payaso delante de la cámara. Me encantan este tipo de personas que se ofrecen, siempre sale alguna foto estupenda.

 

Si habláramos de un autor irretratable, escondidizo, que no se deja, ¿quién te viene a la cabeza?

Hay muchos autores que sufren posando delante de una cámara, pero solo he visto una vez que fueran los fotógrafos los que estuviéramos absolutamente aterrorizados de fotografiar a un escritor, en este caso una escritora: Ane Hold. Me habían advertido de su mal carácter, pero cuando vi que se negó a posar para el anterior fotógrafo que había desplegado un miniestudio con focos para el retrato, empecé a sudar… No sabía como debía afrontar la situación, así que cuando llegó mi turno, opté por sonreír y

camuflarme en un ser inofensivo porque, en el fondo era ella la que se sentía violentada por nosotros. Resultó que acabó dándome más tiempo y quedó un buen retrato.

 

¿Cuáles son tus fuentes? ¿Quién te inspira, Marta?

Cuando empecé a interesarme por la fotografía de retrato me gustaban mucho los fotógrafos de los 70 y 80, porque abarcaban una modernidad basada en el clasicismo estético que me prendaba: Robert Mapplethorpe por su irreverencia, Richard Avedon por la perfección del gesto y la elegancia, Inge Morath  por la plasticidad y la valentía de sus fotos; y otros como Greg Gorman, Robert Frank, Dorothea Lange… Por supuesto, uno siempre empieza por Cartier Bresson, Brassai y André Kertész. Y luego la lista va creciendo. Ahora mismo, me parecen maravillosas las fotos de Arthur Tress de los 70 y los 80. Pero el fotógrafo que más me ha impactado en los últimos diez años ha sido Roger Ballen por la incomodidad de sus fotos. Quisiera añadir que no conocía la obra de Sophie Bassouls hasta que hablé con vosotros. Tiene fotos maravillosas.

 

Nos encontramos camino a la exposición de tu obra en la Sala virtual Hänsel i Gretel*. ¿Qué dirías que vamos a encontrar? ¿Quieres ponernos los dientes largos y salpicarnos algo de lo que podemos esperar de esta exposición las próximas semanas?

Tenemos dos líneas de trabajo: autores españoles y autores extranjeros. En el primer grupo, el visitante podrá mirar a los ojos a Ana María Matute, Juan Marsé, Eduardo Mendoza, Albert Sánchez Piñol, Jaume Cabré y otros nombres fundamentales en nuestra literatura más cercana. En el plano internacional, destacan algunos nombres como Gay Talese y Pierre Lemaitre. Ha sido bastante difícil hacer la selección, ya que tengo un archivo suficientmente grande, pero al final me he inclinado por seguir dos criterios: la calidad de la fotografía y el recuerdo que me generaba. De ahí que todas las fotografías vengan acompañadas de un breve texto en el que explico pequeñas vivencias que experimenté con los retratados. Creo que esas anécdotas, de algún modo, reflejan el carácter de cada autor.

Muchas gracias, Marta. Es todo por ahora, nos vemos con tu obra en unos días.

 

 

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Entrevista de Laura Montorio, coordinadora de contenido de Hänsel i Gretel*

Published inExposición fotográfica "Retratos retratados"PUBLICACIONESSERIE CULTURAL

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